El huevo es un alimento que ha traído mucha controversia en cuanto a su contenido graso, y su influencia en los niveles de colesterol en sangre y sobre la ateroesclerosis. Si bien la clara de huevo se libera de este debate, porque el macronutriente que se encuentra en mayor porcentaje es la clara de huevo. La yema no ha corrido con tanta buena suerte. Esta es la parte del huevo que aporta las grasas.
La yema de huevo aporta no sólo colesterol, sino otro tipo de grasas que son beneficiosas para el organismo, incluso se le adjudican propiedades para aumentar el colesterol HDL o bueno.
En cuanto al colesterol, una yema pesa en promedio entre 15 a 18 gr., la cual aporta aproximadamente entre 200 a 240 mg de colesterol, dependiendo de su tamaño (es importante aclarar que se recomienda no consumir más de 300 mg de colesterol por día).
Como puedes observar la yema de huevo es rica en colesterol, y por lo tanto es necesario controlar su consumo. No obstante la buena noticia es que, además de colesterol la yema de huevo contiene otras grasas que son de buena calidad y tienen propiedades nutricionales.
Dentro de estas grasas puedes encontrar: grasas insaturadas, lecitina o fosfatidilcolina y fosfolípidos que son beneficiosos para la salud, y que ayudarían a reducir el riesgo cardiovascular.
Si tienes en cuenta esta información, la respuesta a tu pregunta ¿yema de huevo sí o no para bajar el colesterol? La respuesta es sí, con una frecuencia de consumo de huevo entero de no más de 3 veces a la semana.
Asimismo la yema de huevo aporta otros nutrientes especiales como vitaminas y minerales que también son fundamentales para mantenerte saludable, como por ejemplo hierro, vitamina B12 y vitamina E, entre otros.
Seguramente seguirán investigando sobre la influencia del huevo, especialmente la yema, sobre la hipercolesterolemia y la salud cardiovascular. Por ello, por el momento las recomendaciones dietoterápicas indican una frecuencia de no más de 3 veces a la semana, los demás días puedes consumir clara de huevo si lo deseas.