La yema del huevo acelera la ateroesclerosis

El huevo es uno de los alimentos más controvertidos, a la hora de tratar enfermedades relacionadas con el sistema cardiovascular. Su yema, rica en colesterol, sería la responsable de su mala fama. Al parecer, según recientes estudios científicos la yema de huevo sería un enemigo de la ateroesclerosis, ya que aceleraría dicha enfermedad.

Según ciertos científicos la yema de huevo puede ser perjudicial para factores de riesgo cardiovascular, mientras que otros consideran que el huevo es inofensivo. La realidad es que la yema se continúa estudiando, y se ha observado recientemente que esta puede acelerar el proceso de ateroesclerosis.

De acuerdo con estas investigaciones, el efecto de la yema de huevo sobre la formación de placas de ateroma sería similar a los efectos del cigarrillo.

Los resultados obtenidos en estos estudios arrojaron que, aquellas personas mayores de 40 años que comían yema de huevo habitualmente y fumaban, tenían mayor probabilidad de acelerar el proceso de aterosclerosis. El aumento de las placas de ateroma, se observó en aquellas personas que consumían más de 3 yemas semanales.

Por otra parte, se evalúo a pacientes con otros riesgos cardiovasculares como la diabetes, encontrándose que si consumían 1 huevo al día, el riesgo coronario aumentaba hasta 5 veces.

Si bien la edad influye directamente sobre la formación de placas de grasa, el consumo excesivo de yemas, aumentaba la probabilidad de padecer ateroesclerosis. Por esta razón, aquellas personas con cierto riesgo cardiovascular, deberían evitar comer yema de huevo o consumirla en forma esporádica.