Durante el embarazo se producen alteraciones hormonales y también se produce un aumento de triglicéridos, colesterol total, LDL y HDL. La presencia de colesterol alto durante el embarazo se debe principalmente al aumento de estrógenos, esta alteración en la concentración plasmática de colesterol se normaliza luego del alumbramiento.
Si existiese un estado de hipercolesterolemia previo al embarazo, la gestación podría exacerbar dicha situación.
Riesgos de padecer valores de colesterol elevados por encima de 250 mg/dl en embarazadas
Valores elevados de colesterol en embarazadas pueden ocasionar complicaciones importantes, tanto en la mamá, como en el futuro bebé. Por ello es necesario poner en práctica una serie de medidas, que protejan la salud de la madre y del niño, entre las cuales se puede mencionar una dieta adecuada para reducir el colesterol.
Sin embargo, esta debe tener en cuenta las necesidades de una mujer en etapa de gestación, además de complementarse con la práctica rutinaria de actividad física, adecuada a los meses de gestación que esté cursando.