Ingredientes:
Preparación:
Es muy sencillo preparar la leche de almendras. Ya debes tener las almendras peladas y procesarlas muy bien hasta que quede una pasta finísima. Luego tendrás que colocar el resultante en un recipiente con el vaso de agua y dejar reposar algunas horas, además de añadir el endulzante de tu preferencia (si es que te apetece dulce). Algunos optan por colar posteriormente la mezcla y otros la consumen así como está.
Lo cierto es que la leche de almendras puede ser un interesante reemplazo de los lácteos. Aporta calcio, mucho potasio, fibras, son de fácil digestión y, además, sus ácidos grasos son considerados positivos contra el colesterol, como los de casi todos los frutos secos, aportando también proteínas.