No solamente el saber popular avala este tipo de preparaciones caseras, también lo hace la ciencia. Según un estudio de la Universidad de Valencia, el consumo de zumo natural de mandarina mejora el estado antioxidante y puede disminuir el riesgo cardiovascular en niños. Otra de las razones para incorporarlo como zumo natural contra el colesterol, es que a los pequeños (y a todos) les encanta su sabor.
También la granada es muy buena contra el colesterol. Según se determinó en un estudio, aquellos que bebieron 250 mililitros de zumo de granada al día durante un lapso de tres meses, habían mejorado el flujo de la sangre al corazón. Asimismo, logró establecerse que el zumo de la misma fruta reducía la presión arterial al cabo de un año de consumo diario, disminuyendo la oxidación del colesterol LDL, el llamado «colesterol malo».
Combina frutas. La mezcla de algunas de ellas que sean beneficiosas para tu sistema cardiovascular, tal el caso del melón o la fresa, pueden resultarte muy buenas consumidas a diario en zumo o licuados. No olvides incorporar algunos como el zumo de tomate, el jugo de moras o el zumo de piña para bajar el colesterol.