Sin duda, el deporte y la práctica de ejercicios son muy beneficiosos para tu salud, sin embargo, en ocasiones, una actividad física desmesurada o inadecuada pueden conducirte a la muerte. Descubre cómo y por qué se produce la muerte súbita en el deporte.
La muerte súbita no es ni más ni menos, que el cese de la respiración y de los latidos cardíacos. Si bien el origen de la misma puede ser muy diverso, en la mayoría de los casos es cardíaco. De allí que a menudo, se hable indistintamente de muerte súbita cardíaca.
En cualquier caso, con lamentable frecuencia, la muerte súbita es motivo de los titulares de noticias. No es para menos, ya que cuando afecta a deportistas de alto rendimiento en plena competición surge la duda y se plantea la polémica: ¿el deporte es malo para el corazón?
Lo cierto es que ni una cosa, ni la otra. Si bien el ejercicio de esfuerzo es bueno para la salud y en especial para el funcionamiento cardíaco, debe ser realizado bajo control. De allí que para practicar este tipo de actividades sea un requisito indispensable, los exámenes médicos previos que te habiliten para su realización.
Como te comenté anteriormente, son muchas las causas que pueden provocar una muerte súbita, desde la asfixia por inmersión, pasando por los efectos secundarios de determinados medicamentos o incluso de una anestesia, hasta la electrocución.
No obstante, cuando se habla de muerte súbita en el deporte, a menudo hay que pensar que las causas se hallan en el corazón, ya sea por una sobreexigencia cardíaca, como por lesiones coronarias no diagnosticadas. En ambos casos, es evidente que la mejor forma de prevenir es a través de la realización previa de los exámenes de control, que evalúan tu estado cardiovascular y te habilitan para las exigencias de la competición.
En definitiva, la muerte súbita en el deporte es la que ocurre durante la práctica deportiva o en reposo, en el curso de la hora posterior a la misma.
Sin embargo, este suceso que puede ser visto como una fatalidad o un accidente no es casual. Que un deportista aparentemente «regale salud», no asegura la ausencia de problemas cardíacos congénitos o adquiridos, no diagnosticados y que no se hubiesen puesto de manifiesto en condiciones normales.
La exigencia deportiva por otra parte, somete al organismo a agresiones psicofísicas, que en la forma de estrés, pueden desencadenar un episodio de este tipo. Sin contar que la misma práctica deportiva puede ocasionar una miocardiopatía hipertrófica en los deportistas. Cabe destacar que en cualquier caso, estos cuadros son previsibles y evitables.
Teniendo en cuenta que habitualmente, la muerte súbita en el deporte se produce por causa cardíaca no diagnosticada o sin síntomas previos, te diré cuáles son las principales enfermedades que pueden ocasionarla.
