¿Sientes que el corazón te va a estallar? ¡Calma! Si es la primera vez que te ocurre y aún no te has realizado los correspondientes chequeos médicos, es hora que te los hagas. Si ya te los has hecho y tu corazón está bien, te diré que es lo que te está ocurriendo.
¡Respira profundo! Relájate y presta mucha atención. Estás padeciendo un ataque de ansiedad. Los síntomas de ansiedad en el corazón se pueden manifestar como:
Si bien en una crisis de ansiedad pueden existir muchos otros síntomas, estos son los que te harán temer un ataque cardíaco inminente. De allí que a menudo, se confundan ambos cuadros. Para tu tranquilidad, es muy importante que sepas cómo diferenciarlos.
Sin duda, no es sencillo encontrar la diferencia entre ansiedad y problemas cardíacos, ya que comparten muchos de sus principales síntomas. No obstante, te diré cómo aprender a diferenciar un ataque de ansiedad de un ataque cardíaco.
¿Has diferenciado tu dolor en el pecho causado por la ansiedad del dolor típico de un infarto de miocardio? Pues bien, aún así, quizás quieras saber el por qué de alguno de los puntos que te comento a continuación. Es muy importante que elimines todas tus dudas.
Este es un síntoma que comparten tanto el infarto de miocardio como el ataque de ansiedad. En términos generales, si tu corazón se acelera ante un esfuerzo, debes descartar que el origen sea cardíaco, mientras que si no se relaciona con el esfuerzo, cabe pensar que se trata de un ataque de ansiedad.
Como ya te he comentado, el dolor en el corazón no siempre anuncia un infarto. Si los resultados de tus últimos estudios cardiovasculares no señalan problemas en tu corazón, lo más probable es que se relacione con contracturas musculares de la pared torácica, que provoca la misma ansiedad.
En ocasiones, puedes sentir como sacudidas o saltos en el corazón. Estas molestias, en general, se asocian tanto con el aceleramiento de la frecuencia cardíaca como con una respiración irregular e inadecuada.
No hay ninguna razón para que un ataque de ansiedad provoque un infarto. Lo que sí es cierto, es que en general, las personas ansiosas suman más factores de riesgo cardíaco tales como sedentarismo, tabaquismo, obesidad, etc. Si es tu caso, combate estos factores y no sólo reducirás tu ansiedad, sino que además, ganarás en salud.
¡Tranquil@! ¡No morirás de ansiedad! De hecho, los trastornos de pánico responden muy bien al tratamiento. Consulta a un especialista en terapia cognitivo-conductual. Te ayudará a superar tus problemas de ansiedad.
En cualquier caso, las siguientes recomendaciones no sólo te ayudarán a reducir tu ansiedad, sino que además, son buenas para mantener tu corazón sano y fuerte. ¡Ténlas en cuenta!