Triglicéridos elevados, origen y consecuencias
Controlar los niveles de triglicéridos es sumamente importante, ya que puede librarte de más de un dolor de cabeza. Pero para comprender el origen que provoca que estos se eleven por encima de las cifras normales, es necesario conocer las causas. Asimismo es necesario comprender cuáles son las consecuencias que puede acarrear la hipertrigliceridemia, especialmente sobre el sistema cardiovascular.
Cuando una analítica de sangre refleja valores de triglicéridos superiores a 150-200 mg/dl, es necesario en primera instancia recurrir al médico para establecer el origen de esta hipertrigliceridemia.
¿Cuáles son las causas que provocan triglicéridos altos?
- Exceso de producción de triglicéridos. El exceso de consumo de grasas e hidratos de carbono simples (los cuales son transformados en grasas a través de un proceso metabólico que se produce en el hígado).
- Destrucción insuficiente de tejido grasa, por baja cantidad de ciertas enzimas que intervienen en dicho proceso, como por ejemplo la lipoproteín lipasa encargada de tomar los ácidos grasos a nivel intestinal, transportarlas hacia los tejidos periféricos. También intervienen en su mecanismo inverso. Es decir que si hay un déficit de dicha enzima las grasas consumidas no se pueden utilizar debidamente, y tampoco se pueden trasladar a las células para su combustión. Por lo tanto aumenta la concentración de triglicéridos en sangre.
- Hipotiroidismo.
- Insuficiencia renal.
- Tratamientos hormonales.
- Medicamentos como tamoxifeno o inmunosupresores.
- Síndrome metabólico.
¿Cuáles son las consecuencias que provocan hipertrigliceridemia?
- Obesidad. La obesidad puede ser una causa o consecuencia de tener los triglicéridos altos.
- Síndrome metabólico, ya que al producirse hipertrigliceridemia, aumenta la circunferencia abdominal, la tensión arterial (ya que la sangre es menos fluida) y la intolerancia a la glucosa que puede derivar en diabetes tipo 2 (el azúcar que se consume no puede ser utilizada por las células por una resistencia a la insulina y se acumula en sangre, provocando dicha intolerancia. Por otra parte se reduce el colesterol HDL o bueno, cuya lipoproteína es la encargada de barrer el colesterol malo y los triglicéridos que se acumulan en las paredes arteriales.
- Riesgo aterogénico alto. Si los triglicéridos están altos, hay más probabilidad que el riesgo de que se tape una arteria sea mayor. Por lo tanto hay más chances de que se produzcan eventos cardiovasculares importantes.
- Asimismo, la elevación de triglicéridos, por ejemplo por problemas renales, puede a su vez dañar aún más los riñones, ya que la circulación de la sangre se altera.
Muchas de las causas del origen de la hipertrigliceridemia, también pueden ocasionar consecuencias graves sobre los órganos que provocaron que los triglicéridos se elevaran. Por esta razón es muy importante estar atento, y evaluar en forma periódica los niveles de triglicéridos en sangre, que como se puede observar dicen mucho más que un simple número.